Este año me entró de nuevo el gusanillo de las películas americanas, ya que
Quentin Tarantino ha vuelto con su
Django desencadenado, así que, estoy intentando ver todas sus competidoras en los
Oscar para 2013. De las que he visto, ésta es la mejor, si bien,
Argo le está pisando los talones, no olvidándome de
La vida de Pi, que es entretenida y guapa (si se puede dar este calificativo a una película). Además, hay que tener en cuenta a
La noche más oscura, que nos entretiene esperando el desenlace de la caza del terrorista. El resto de las películas aún no las he visto. Esta tarde, ya me he decidido, iré a ver
Amor, de
Michael Haneke. Sin embargo, la que me resisto a ver es la de los
Miserables, no puedo con los musicales, no sé, a ver si se me olvida ésto, me acuerdo de
Hugh Jackman y entro a verla, tampoco me atrae mucho
El lado bueno de las cosas ni
Bestias del sur salvaje, si las veo o no lo decidiré a lo largo de la semana. La que sí veré, evidentemente, será
The master de
Paul Thomas Anderson.
[Antes de que se me olvide,
Nameless Gangster, de
Yun Jong-bin (Corea del Sur), con el gran y poco alabado
Choi Min-sik, se estrenó el día 18 solo en algunas ciudades. A causa de este hecho se me olvidó felicitar el cumpleaños a
Takeshi Kitano, ya sé que no tiene que ver una cosa con la otra, pero en cuanto anuncian una película coreana o japonesa en pantalla, ya parece que no tengo más planes que ir al cine. Se podrá ver la película en las ciudades y cines siguientes: Barcelona – Cines Maldà. Madrid – Artistic Metropol. Santa Coloma – Cinema City. Lleida – Espai Funatic. Petrel – Cine Max. Girona – Odeon. León – Odeon. Ferrol – Odeon. En cuanto termine con esta historia que me he programado de los
Oscar, haré una entrada como se merece. Pero os adelanto que el tema de que trata la película está muy actualizado en nuestro país, corrupción y más corrupción, junto con lo que llamamos cambio de chaqueta].
El viernes fui a ver
El vuelo, de
Robert Zemeckis, ayer
Lincoln, de
Steven Spielberg (
Rajoy, súbeme el sueldo). Sin extenderme, solo algunas pinceladas. La primera entretiene y la segunda aburre.
Que sí, ésta tiene buenas cosas, algo diferente de la vida
Licoln, es muy curiosa su familia, su hijo pequeño con padre-presidente mientras éste despacha asuntos de gobierno; luego la esposa,
Sally Field (es la mejor de todo el reparto), que es algo odiosa, pero qué tía, hasta amenazaba al larguiducho.
En cuanto a
Daniel Day-Lewis, con cara de palo durante toda la película. Los únicos gestos que hace son: ahora meto las manos en el bolso, ahora las saco. Otros gestos: sube ceja, baja ceja, de vez en cuando ¿o solo fue uno?, da un manotazo en la mesa. Por cierto, la compra de votos estaba al orden del día. Un diez a su maquillador. También está
Tommy Lee Jones, otra cara de palo, se han retratado los que les han nominado.
Spielberg es capaz de ganar el
Oscar, pero será entonces un año de premios para olvidar, al menos, por mi parte.
Mucho más interesante, salvo el final, pues, al ser una película americana para consumo de masas tiene que subir a las alturas (nunca mejor dicho) las mejores cualidades del ser humano. Sin embargo, si hubiese sido más valiente su director,
Robert Zemeckis (
John Gatins firma el guión), estaríamos hablando de una de las grandes películas de este año, al menos, nos harían dar un poco al coco, porque según está, no deja de estar al mismo nivel de muchas películas para la sobremesa hechas para la televisión, personajes que tocan fondo pero, cómo no, se sobreponen y son mejores personas, vuelven los mejores sentimientos que esa sociedad americana quiere que prevalezcan.
Ahora qué decir de
Denzel Washington. Que está fantástico. Nos muestra en sus propias carnes esa decadencia del ser humano que nadie quiere. Un tipo asqueroso, al menos yo no soporto a los borrachos, bebe y bebe. El problema es que es piloto de aviones y muchas vidas están en sus manos. Para eliminar los efectos del alcohol se mete cocaína. Desde lo más alto a lo más bajo.
Las escenas del accidente del avión, muy buenas. Sobre los personajes secundarios, hay de todo, el que interpreta
John Goodman es muy divertido, un camello necesario; no puedo decir lo mismo del interpretado por
Kelly Reilly, la fotógrafa yonqui, es totalmente prescindible, comienza muy prometedor pero por arte de birlibirloque es otra persona completamente distinta. Lo cierto es que la nominación al Oscar al mejor guión original es incomprensible.
Pero volvamos a
Denzel Washington, si esta película está donde está, es por él. Ha hecho un gran trabajo, lo peor es que nos deja ver su culo y barriga orondos. Los estragos de los excesos nos lo hace sentir. Qué final sería el más adecuado. Decir que si no fuese por lo que se había metido, el resultado del accidente del avión sería otro, tal vez, no hubiera sobrevivido ni el apuntador.
Dicho lo cual,
Denzel Washington vs. Daniel Day-Lewis, vencedor por KO,
Denzel Washington. Evidentemente, el favorito al Oscar es
Daniel Day-Lewis, no es que quiera ir contracorriente, lo fácil sería decir lo contrario a lo que pienso y como ese no es mi estilo, la porra no la ganaré.
Tengo prisa, así que
, ya iré poniendo fotografías y tráilers de las películas. Que os divirtáis si vais al cine y si no, también.
